Las quemaduras solares son uno de los problemas más frecuentes que enfrentan los viajeros que buscan destinos de sol, playa, e incluso, rutas montañosas. La exposición solar prolongada y sin que tengamos una adecuada protección a la luz del sol, provoca irritación en la piel, hipersensibilidad y, en caso extremo, quemaduras solares. Independientemente de la época del año en que viajemos, tenemos que brindar atención a la protección de nuestra piel ya que las quemaduras no sólo son molestas y dolorosas sino que son dañinas para la salud. Para evitar las quemaduras solares debemos:
Para tratar las quemaduras solares debemos colocar compresas frías en las zonas enrojecidas y medicarnos con algún analgésico (paracetamol, codeína o aspirina). No se debe aplicar cremas a la piel irritada.
Si viajamos con niños, debemos recordar que su piel es más sensible que la piel de los adultos, por ello, debemos tomar las siguientes precauciones contra quemaduras solares: