Una de las principales precauciones que debemos tener al viajar es el cuidado con el agua y los alimentos. Los viajeros debemos tener cuidado con lo que comemos y bebemos, sobre todo, si viajaremos a un país tropical ya que los alimentos y bebidas contaminadas son una de las principales causas de enfermedad en el viajero. Cada año aumenta la cantidad de viajeros que son víctimas de una enfermedad infecciosa y el número de enfermedades que ponen en riesgo la salud. Por ello, para prevenir los problemas de salud al viajar, debemos:
– Lavarnos las manos con frecuencia y de forma impresindible antes y después de comer, ir al baño o manipular alimentos.
– No consumir hielo si no conocemos el tratamiento que ha recibido el agua.
– Beber sólo agua, refrescos y bebidas embotelladas.
– Sólo consumir derivados de la leche que sean pasteurizados.
– Evitar comprar comida en vendedores callejeros.
– No comer verduras crudas y evitar las frutas que no pelemos nosotros. Lo recomendable es que los alimentos los lavemos, cocinemos y pelemos nosotros mismos.
– Preferir las comidas cocidas y que se sirvan calientes.
– Evitar las salsas que tengan huevos crudos como base de preparación.
– Evitar los mariscos y pescados crudos. En los viajeros es común la gastroenteritis por este tipo de alimentos, sobre todo, el consumo de almejas, mejillones, ostras, y otros.
– De preferencia evitar las playas y preferir las piscinas con agua clorada. Si vamos a una playa, averiguar si son zonas de medusas, erizos, u otros que son irritantes de la piel. Lo mismo en la ciudad, evitar el contacto con animales de prevención a mordeduras o picaduras.
– Evitar el caminar descalzo sobre todo en zonas tropicales donde podemos encontrar serpientes y escorpiones.
La única forma de disfrutar de unas agradables vacaciones es no dejarnos llevar por la apariencia de los alimentos y seleccionar con cuidado todo lo que pensamos comer y beber. Si seguimos estas medidas de precaución, disminuiremos las probabilidades de enfermarnos durante el viaje. Debemos recordar que no existe vacuna contra estos males y que no se recomienda el uso de antibióticos. Además, tener en cuenta que las prevenciones varían según el país de destino, época del año, y duración del viaje.
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