El clima que tiene Glasgow no es parecido al del resto de Escocia, y se debe más que nada a su ubicación sudoeste, además que le beneficia la Corriente del Golfo hasta el flujo de las corrientes Clyde desembocadura del calentamiento del Atlántico en toda la región. Gracias a la protección que le brindan las montañas y Colinas que rodean el Clyde Valley los veranos que son de mayo a setiembre se caracterizan por ser luminosos y largos.
Aunque el clima suele ser impredecible durante todo el año, los inviernos de diciembre a febrero, en su mayoría son fríos y húmedos. La temperatura máxima puede llegar a 32 ºC y la mínima a -17 ºC. En realidad todo el tiempo es un clima templado y si un día está lloviendo, en cinco minutos puede cambiar y salir sol. Por eso no te recomendamos traer ropa muy abrigadora, ni muy veraniega.
Con polos, pantalones de drill y uno que otro saco para cuando sientas frío estará bien, cuando vayas a pasear a las orillas del río Clyde, no olvides llevar abrigo pues por la humedad las tardes suelen ser frías alrededor.